.
. .
.El dolor detuvo los días, impuso sus normas.
ISABEL BONO
.
.
.
Un corzo corre
rasga el campo
como a un folio viejo
y veo
tanta hondura tantas
cosas agolpadas en el aire
brillando en este segundo
tan delicadamente sostenido
por el azar.
.
.
.
Tú estás en mí
per-
maneces eres
el lugar
donde el dolor curva los cucharas donde
las columnas vertebrales
se arquean armónicas
rogándole a la vida
un poco de clemencia
pidiéndole
una boca más grande una
abertura
donde poder
introducir
con profunda devoción
el fruto blando de los días
la tibia jalea que circunvala
la palabra
plenitud.
.
.
Infectas mi pecho algo
muere en mí cuando te amo -pienso
las cosas más bellas de este mundo
nacen del horror
del espanto de reconocerse débil
y horadado
per-
dido
en el insalvable
desamparo de la entrega.
.
.
.
foto: bárbarabutragueño2012